miércoles, 12 de noviembre de 2014

Quiero cogerte...

Quiero cogerte… coger tus penas, tus temores, tus miedos, tus tristezas, tu cansancio, tu llanto. Quiero coger todos esos sentimientos y  tirarlos por la borda para que nunca más los vuelvas a sentir…
Quiero cogerte de la mano y que caminemos a lo que algunos llaman el camino de la felicidad para conocer toda esa belleza que llevas por dentro, toda la pasión, toda la alegría, todo el amor que tienes ahí dentro, y que no te gusta mostrar…

Quiero coger todo el tiempo que hemos perdido, coger cada oportunidad que he dejado pasar para estar junto a ti. Quiero coger todos los momentos que sean necesarios para conquistarte, con cada detalle, con cada palabra, con cada acción que te haga ver todo lo que siento por ti…

Tengo ganas de cogerte tan fuerte de tu cara, para que en mi mirada puedas ver todos los sentimientos que provocas en mi ser… quiero cogerte y apretar tan fuerte tu mano  con ganas de decirte tantas cosas, susurrándote al oído que me haces sentir vivo, porque cuando estoy contigo soy otra persona, no encuentro las palabras para describirlo…

Quiero cogerte de tu mano y que cerremos los ojos por un momento, he imaginar años de locura, de ternura, años sonriendo, años de cosas no tan buenas, pero años en los que siempre estás a mi lado…

Quiero ser parte de tu vida, enamorarte todos los días, tocar el cielo, la luna y las estrellas con tu cuerpo e ilusionarme noche y día…



Así que la próxima vez que me preguntes si quiero cogerte, la respuesta es SÍ! QUIERO (que estés conmigo siempre y) COGERTE (de la mano para recorrer la vida junto a ti...)


martes, 11 de noviembre de 2014

¿Amor al fútbol o fútbol al amor?





Ojalá el amor fuera como el fútbol, puedes perder o ganar, a veces juegas de local otras de visitante, pero siempre tienes revancha…

Uno de los amores más intensos que existen en el deporte es el que tiene el fútbol. Muchas personas por 90 minutos no existen y le dedican su vida a un partido, a un momento. Prenden veladoras, le rezan a sus santos favoritos, se ponen la playera de su equipo. Gritan, se emocionan, se enojan, lloran de alegría y de tristeza. Se pelean por defender a su equipo, puede ganar o perder, pero su amor es incondicional.

A pesar de cómo los trate su club favorito, están con ellos aunque ganen, y en la vida real, el amor no es tan diferente como lo es en el fútbol… Una persona cuando se enamora, puede perderlo todo, o ganarlo todo, según sea su suerte.


Te puedes enojar, llorar, reír, todos los sentimientos que quieras, considero que se trata de disfrutar los pequeños momentos que te da la vida, ya que al final es sólo un juego, el amor y el fútbol, y a veces dura 90 minutos o te puedes ir a tiempos extra o penales…