miércoles, 27 de marzo de 2024

Me aventé del paracaídas

 Más de 17 mil pies de altura en las que estás con un instructor, un paracaídas, el cielo y tú solo contra el mundo. Todo lo que tuve que pasar para llegar a ese momento fue una verdadera locura. 

Tenía años postergando este momento, al menos 10 de que lo había pensado pero nunca lo había hecho realidad. Llevo una año tratando de reconstruirme, poco a poco tratando de encontrar la mejor versión de mi, no ha sido fácil pero probablemente mentalmente es la versión más fuerte que he tenido en toda mi vida, y eso se refleja en todos los sentidos de mi, estoy en el mejor momento de mi vida. En diciembre decidí tomar acción y arreglar todo para aventarme del paracaídas. Normalmente improviso en todo lo que hago pero esto si planee todo, con ayuda obviamente, pero todo fue planeado. Decidí hacerlo en el día de mi cumpleaños para no olvidar jamás este momento que siempre me llevaré en mi corazón. 


Soy una persona que sufre todo clase de nervios antes de que pasen las cosas, conforme se acercaba la fecha la presión iba aumentando. Cada día que se acercaba mis nervios aumentaban, es la mayor locura que he hecho en toda mi vida con mucha diferencia de la segunda, y es por mucho, la vez que en mayor riesgo en puesto mi vida. La vez que me aventé del bungee en Acapulco no es ni el 10% de lo que sentí. 

Una noche antes no pude dormir, me sudaban las manos más de lo normal, los ratitos que pude dormir soñaba con el momento de aventarme, tenía náuseas, me sentía mareado, todo. La presión estaba dominando a una persona total y absolutamente segura. 


Llegó el día, el salto estaba programado a las 12:00 del día, mi única preocupación desde el desconocimiento era que no lloviera y que hiciera un buen día. El día no podía ser más perfecto. Los nervios aunque pareciera mentira iban bajando conforme se acercaba el momento, y mi seguridad crecía, me puse a pensar en todas y cada una de las cosas que he hecho en mis más de 30 años y si por la razón que fuera, algo malo me pasaba, me podía ir con la tranquilidad de haber vivido una vida feliz. 

11:30 del día, comenzó el registro, todo en orden, todo ok, estaban alistándose unas personas que iban antes, normalmente se avientan unas 10-12 personas por viaje, todo estaba listo, cuando de repente se escuchó en el micrófono “los saltos quedan suspendidos temporalmente por el aire”. Estaba corriendo aire más de lo normal y era más peligroso de lo que ya era peligroso. Tocaba esperar a que pasara el aire (spoiler) nunca pasó, al contrario, aumentó. Después de dos horas, los organizadores de los saltos te daban dos opciones, reprogramarlo para otro día o irte a Cuautla Morelos, el lugar más cerca para aventarte que quedaba a una hora. No dudé ni un sólo segundo porque quería hacerlo ese día, en mi cumpleaños, era mi momento. 


Todos los nervios de días previos desaparecieron, tocaba resolver y tocaba hacerse grande, me fui lo más rápido posible, una hora de camino desértico, sin pensar en nada más que en aventarme. 

Llegando a Cuautla, el ambiente, el lugar y todo era perfecto, casi no había viento y las condiciones eran inmejorables, el registro bastante rápido y todo listo. Sólo tenía una petición, aventarme con los lentes del ferxxo, mi cantante favorito de reggaeton. Deseo cumplido. Pasé al área de preparación, conocí a mi instructor, me explicó todo. Todo estaba listo, todo estaba preparado. Los lentes y mi presencia jamás pasan desapercibidos, antes de aventarme me pusieron música del ferxxo sin pedirla, la última canción que escuché antes de subirme a la avioneta fue la de “luna” de Feid, si era la última canción que iba a escuchar, lo pagaba con creces. 


Subimos a más de 17 mil pies de altura, toda una aventura, toda una odisea, lo más difícil de subir a esa altura no es subir, es bajar aventándote de un paracaídas. Mientras iba subiendo mis manos comenzaban a sudar más de lo normal, mi cuerpo estaba temblando, mis manos entumidas, mi corazón a mil por hora, pero dentro de todo, lo estaba disfrutando. Antes de aventarme y mientras subía, iba recordando muchos momentos de mi vida en los que genuinamente fui muy feliz. El primer gol que metí en mi vida con el equipo de mi colonia en el que mi mamá estaba llorando de felicidad, la vez que me titulé de la universidad, la vez que me escucharon narrar más de 200 mil personas un partido de fútbol y momentos con personas que formaron parte de mi vida en los que fui muy feliz. Todo pasó por mi mente. 


Llegó el momento, la avioneta había alcanzado la altura después de 20 minutos. Éramos mi instructor, yo conectado a él con la puerta de la avioneta abierta a más de 17 mil pies de altura, viendo todo de frente, al vacío. Recuerdo ese momento y se me pone chinita la piel y me sudan las manos. Todo estaba en sus manos, yo dependía de él. Nos aventamos sin dudarlo. No puedo explicar con palabras lo que se siente porque es una sensación de libertad y de adrenalina que nunca en mi vida había sentido, mi corazón iba a explotar, fueron 45 segundos de caída libre en las que mi cuerpo fue llevado al máximo de su límite, fue por mucho la mayor locura que había hecho en mi vida. Se abrió el paracaídas y fueron 5 minutos de tener la mejor vista de mi vida. Seguía temblando, seguía sin creerlo, mis manos, mi cara estaban entumidas, estaba en shock. Después de 5 minutos mis pies tocaron tierra, volví a nacer, estamos vivos. 

Lo logré y de verdad volví a nacer. No te puedo decir que soy otro porque sería mentir pero me di cuenta después de superarlo y tomarme dos cervezas de golpe y después de muchas horas de que pasó, que es lo que quiero y que es lo que no quiero en mi vida, pude escuchar el silencio en el cielo, pude ver muchas cosas, y si de algo estoy seguro es que lo más valioso que tenemos en esta vida es el tiempo y la vida misma, y no quiero desperdiciarlo, quiero vivirlo al máximo y disfrutarlo y no solo vivir por vivir como lo había hecho en el último año. No solo no morí en esta locura, sino que aprendí que no hay límites en esta vida y que vale la pena vivir intensamente cada segundo que estemos vivos. 



miércoles, 23 de junio de 2021

El gol más emotivo de mi vida

 Juego fútbol desde que tengo 5 años, la categoría se llamaba "cachorros" tengo que reconocer que más que jugar al fútbol y ser muy bueno, me gusta verlo, pero desde esa edad fui un apasionado del fútbol y de los deportes. A esa edad me gustaba meter goles como todo niño, ya con el paso del tiempo fui conociendo y descubriendo mi verdadero talento. Como delantero siempre me consideré como el típico cazagoles que sabía donde estar en el momento y lugar adecuado para meter los goles. En los torneos que había en mi escuela, mi salón siempre tuvo un gran equipo, y yo, al estar rodeado de buenos jugadores, era muy fácil anotar goles, y así, año con año terminaba campeón del torneo y campeón goleador. Cuando tenía 7 años me operaron de la apéndice, y me costó regresar a volver a jugar un par de meses, en los que después de regresar me daba miedo que me pegaran en el estómago y algo me pasara, por lo que me costó un poco volver a jugar. En ese proceso, jugaba en el equipo de mi colonia, pero como todo goleador y jugador, si no tienes la confianza de tu entrenador, es muy difícil meter goles, aparte de que me hacían jugar en una posición diferente, muchos meses los pasé en la banca y con pocos minutos en el campo, por lo que era cada vez más y más difícil, pero aún así,  como todo niño, siempre que entraba a jugar lo hacía con mucha emoción y la mejor de las ganas. Un día, en un partido a las 12 del día, con el calor a más de 30 grados, en el campo de mi colonia, con muchas personas viendo nuestro juego, en un partido complicado, íbamos 1-1, yo estaba en la banca esperando poder jugar unos minutos, mi entrenador faltando 20 minutos para acabar el partido decidió meterme a jugar, ese día me sentía con muchas ganas de jugar y conforme avanzaban los minutos las cosas en el campo me comenzaban a salir. Recuerdo que uno de mis compañeros arrancó por la banda izquierda, el otro delantero que estaba a mi lado hizo un movimiento de desmarque hacía ese lado y me dejó prácticamente solo afuera del área, me tiraron un centro por abajo, yo estaba solo sin marca, y sin pensarlo, le pagué al balón como venía y crucé la pelota hacía el otro lado, la cual entró pegada al poste, en ese momento pude escuchar el silencio por unos segundos, y lo primero que hice fue correr con la mano arriba con mi dedo indice levantado mientras veía como todos los que estaban ahí me aplaudían porque sabían cuanto lo había deseado, mis compañeros festejaron conmigo mientras veía como mi mamá derramaba lágrimas de felicidad. Fue un gran día y sin lugar a dudas de los goles más emotivos que he metido en mi vida.  

martes, 27 de abril de 2021

Dorito


 Han sido ocho años en los que he podido convivir con dorito, el perro de uno de mis mejores amigos, literalmente desde que tenía días de nacido nos conocimos, era tan pequeño, que por pasar tanto tiempo en casa de mi amigo, logramos crear un lazo muy entrañable, y es que cuando mi amigo se iba de vacaciones o salía los fines de semana, le iba a dar de comer y pasaba tiempo con él, en alguna ocasión se quedó en mi casa. Siempre que me quedaba a dormir en casa de mi amigo, siempre dormíamos juntos, ha sido parte de mi sin ser su dueño. Hace unos meses dorito enfermó y ya no puede caminar como antes, de hecho ya no puede caminar, ha sufrido mucho estos últimos meses, no sé hasta cuando y cuanto aguante, pero este perrito aparte de tener un gran corazón, me ha robado el corazón a mi, me duele mucho verlo así, ojalá los perritos vivieran mucho más tiempo. Espero ir en unas semanas a verlo y que seamos muy felices como en la foto que aparezco con él, con mi pequeño y entrañable amigo Dorito. 

El primer élite de mi vida en FIFA 21



¡Tantas veces te pedí una desgraciado, tantas veces!, he vomitado bilis por tí, se me ha caído el pelo por ti, tengo nervios por ti, voy al psiquiatra por ti y hoy, ¡Hoy por fin apareces maldita sea!

Fue probablemente el primer pensamiento que tuve hacía mi mismo después de tantos meses de estrés, de coraje, de impotencia, de tristeza, de rabia y de enojo porque no se me daban las cosas. Fifa es un juego muy divertido y entretenido offline, la gente que juega en modo carrera o retas con sus amigos seguro la pasa bien. Pero jugar online, tratando de ser competitivo en el modo de juego más tóxico que he jugado en mi vida.

He jugado videojuegos de fútbol desde que tengo 7 años, Internacional Super Star Soccer en super nintendo fue el primero, Megaman Soccer, Winning Eleven que para mi fue el mejor juego de la historia, todos los PES hasta el 2012 y de FIFA 13 hasta la fecha. En todos, cuando menos entre mis amigos y las personas con las que jugaba era el mejor con mucha diferencia, gané cualquier cantidad de torneos, la verdad me sentía invencible. Cuando entré a FIFA al modo competitivo de fut champions me encontré con muy buenos jugadores de muchas partes del mundo, me costó adaptarme y me hubiera gustado entrar a ese modo de juego años antes en los que tenía menos responsabilidades y más tiempo libre para poder competir a mi máximo nivel. Tiene como año y medio que he tratado de jugar competitivamente, el mayor logro para cualquier persona que juega en Ultimate Team es llegar a élite. Cada fin de semana hay 30 partidos en los que si ganas mínimo 23 entras a ese sagrado grupo donde yo creo que un 15% como mucho de los que juegan habrán llegado a ese rango. Desde hace año y medio semana a semana había tratado de conseguirlo, de intentarlo, de dedicarle horas al juego para entrenar y jugar pero nunca le dedicaba el tiempo suficiente y siempre me quedaba cerca o muy cerca del objetivo. El año pasado mi mejor resultado fueron 20 victorias que es oro 1, pero yo sentía que mi nivel estaba para mucho más.

En este nuevo FIFA y con la pandemia por delante tuve mucho más tiempo libre para jugar y ponerme a un nivel muy alto. Empecé por armar el mejor equipo posible tradeando desde el día 1, eso si, sin meterle un solo peso al juego, yo sentía que no tenía necesidad de hacerlo. Lo armé muy rápido, y en mi primer fut champions llegué a 22 victorias, a una de las 23. A medida que avanzaba el juego fui aprendiendo de mucha gente que sabe mucho, veía a pro players, copiaba tácticas de personas que saben del juego, formaciones, etc. Pero seguía quedando en el oro 1 de mierda y cuando me daba pereza acabar la jornada, lo dejaba en 14 victorias. Aunque mejoré muchísimo desde hace un año y medio a la fecha, no se me daba llegar a élite.

Este fin de semana con la llegada de los TOTS, que básicamente son las cartas más chetadas del juego con las mejores recompensas, sabía que iba a ser mucho más difícil llegar, y es que en fut champions te enfrentas a todo, servidores de mierda que tiene el juego, hándicap en contra, mala conexión, desconexión de los servidores, jugar contra pro players verificados que están 24/7 jugando, todo, es una puta locura!

Este fut champions empecé como casi siempre, jugando los primeros 11 partidos a muy buen nivel, me puse 9 victorias y 2 derrotas, las dos muy evitables, pero a medida que avanzaba la jornada me sentía más y más cómodo, claro que todo eso puede acabar cuando te enfrentas contra enfermos que viven del juego y son mucho mejores que tú. El domingo me quedaban muchos partidos por delante pero me sentía con muy buenas sensaciones. Iba 17.7, y pensé en dejarlo, para llegar a élite tenía que ganar 6 de 6 partidos, en esas instancias, era una maldita hazaña. En la victoria 20, me enfrenté a una mujer, algo muy inusual que me pase, porque aparte por lo que me jugaba de cambio de rango, jugaba y jugaba muchísimo, tanto que me empezó ganando, las esperanzas del élite se iban a bajo; cambié mis tácticas y me puse más tryhard que nunca, la empaté y le di la vuelta, me empató al 90´, nos fuimos a tiempos extra y le volví a ir ganando pero en el 120´me volvió a empatar, nos fuimos a penales, los que en el juego, no son suerte y en los que afortudamente ella no sabía patear, y es que con todo mis respetos para las mujeres, que seguro hay muchas que se dediquen a jugar y me ganen, no tienen el colmillo y la malicia que cuando menos, tengo yo. Le paré todos los penales y le gané. Ese partido en lo anímico me dio para arriba, por lo que la victoria 21 y 22 llegaron con esa motivación.

Le quedaban 3 minutos a la jornada de fut champions y me juega por primera vez en mi vida, la opción de llegar a élite, estaba nervioso, muy nervioso, pero siempre confiante, sabía que no podía fallar, encontré rival y era un jugador verificado que desde noviembre se hace élite, de esos que viven 24/7 en el juego, con un equipazo con Pelé liderando su ataque, sabía que iba a ser difícil, el partido, fue una locura de principio a fin, al final pondré el link del partido para quien lo quiera ver; empecé perdiendo 0-2, la desgracia y la cruzazuliada se veía venir, estaba muy nervioso pero sentía que podía competir, cambié mis tácticas, respiré profundo y me centré en intentar darlo vuelta; antes de acabar el primer tiempo logré empatar, mis jugadores por poner una presión intensa estaban reventados, pero quedaban 45´ para lograr la gloria, debía seguir hasta donde aguantaran. Empezó el segundo tiempo y con ello mi juego mejoró, logré ponerme en ventaja muy rápido, al ir ganando no sabía que hacer, los nervios se incrementaban a medida que avanzaba el partido, al 70´decidí echarme para atrás y confiar en mi forma de defender y aguantar y aguantar, defendí como nunca, cero errores, y con muchos sustos y un gol en fuera de lugar de mi rival donde casi se me sale el corazón, logré por primera vez en mi vida llegar a la mansión élite. Un logro que probablemente por las horas y el desgaste que tuve, lo puedo comparar con la vez que me titulé de la universidad o cuando firmé el contrato de mis sueños en el trabajo de mis sueños, estaba y sigo estando inmensamente feliz. Son tantas personas que a las que les tengo que agradecer haber estado ahí conmigo, echándome porras, dándome ánimos, que de verdad ustedes saben quienes son y gracias infinitas.

Este logro me ha demostrado que cualquier cosa que me proponga la puedo lograr, no importa lo difícil que sea, con Dios por delante y sobre todo con muchos HUEVOS, todo es posible. Alegría!!!

Video donde me juegos el élite: https://www.youtube.com/watch?v=CRKfdMctT_c




viernes, 16 de abril de 2021

Corazón Valiente

 Durante un tiempo he escrito muchas cosas desde el enojo, el dolor, el coraje, y muchos sentimientos negativos que he tenido guardados por mucho tiempo dentro de mi. Más allá de lo que te pase en la vida, sea bueno o malo, acumular cosas malas dentro de ti, al final es como vivir podrido por dentro, amargado sin ganas de nada, y creo que de eso no se trata la vida. 

Si bien es cierto, es muy duro ver como una persona que creías era el amor de tu vida, te hace mucho daño y se va, es una sensación que no se la deseo a nadie; creo que todos en algún punto de nuestra vida entregamos todo por alguien, realmente todo, y a la mayoría de las personas nos fallaron y nos cambiaron la vida. 

Hay días en los que me levanto y me dan muchas de volver a enamorarme y entregarme por completo, hay días en los que quisiera buscar a la que yo pienso fue el amor de mi vida y decirle que la extraño y que quiero empezar de cero y ser felices como alguna vez lo fuimos. Sobre todo porque pues, ninguno de los dos se murió, he visto muchas historias de amor en las que desgraciadamente una persona muere y  ya no puedes hacer nada para estar con esa persona y  te la pasas jodido toda la vida. 

Y es que de verdad que complicado hacer click con alguien y tener esa química, esa sensación que te dio el amor de tu vida y que nadie la puede igualar, creo que cuando conoces al amor de tu vida ya no quieres a nadie más, sólo vives para esa persona, pero también no es bueno crear una dependencia sobre algo o alguien, porque cuando ya no está más, tu vida se vuelve incompleta. 

Hace unas semanas comencé a ver una historia de amor y pasión con lucura por cuarta vez en mi vida que se llama "corazón valiente" y a medida que avanza la trama, que ganas de volver a enamorarme con esa intensidad que alguna vez di, sentir cosas nuevas que nadie me había hecho sentir, estar feliz todo el tiempo, vivir en un sueño. 

Honestamente, antes de volver a escribir tenía pensado algo escrito desde el odio y el resentimiento pero creo que entre más odias a alguien, más odio hay dentro de ti y pues la pasas mal por una persona que tal vez ni te recuerda, entonces no vale la pena desgastarse emocionalmente en cosas que ya pasaron. Lo mejor que se puede hacer es perdonar aunque no te hayan pedido perdón y seguir con tu vida, pero de verdad sin nada negativo dentro, tratando de ser feliz sin cerrarte a las personas ni a nada porque nunca sabemos cuando te vas a cruzar con una persona extraordinaria que va a cambiar tu vida por completo, alguien que te de lo que tanto le pides Dios, alguien que su lealtad esté a la altura de la tuya, alguien que te elija todos los días, alguien que no tenga miedo a nada esté dispuesta a darte su corazón valiente. 

miércoles, 27 de enero de 2021

Imposible amor

 No somos ni seremos 

Pero si fuimos y estuvimos

Fuimos las personas correctas

 con las vidas equivocadas

Fuimos la forma más triste y bonita que tuvo la vida en decirnos que no podemos tenerlo todo


Lo sé, lo sabes

Eres mi amor para otra vida

Mi amor para otra ocasión 

El amor de mi vida


Llegaste demasiado pronto 

Y aún así fue tarde

Me entendías más que nadie

Y no existió alguien que te quisiera más que yo


Siempre he creído que todo en la vida es posible 

Y que lo imposible sólo cuesta un poco más 

Pero contigo amor imposible 

Esta teoria está de más 


A veces siento que fuimos impuntuales 

o puede que el destino se haya encaprichado

 tanto con nosotros que nos puso un minuto tarde 

O tal vez una persona tarde o después...

Fuimos todo y no fuimos nada. 




sábado, 12 de diciembre de 2020

Las peores 72 horas de mi vida

 Este año ha sido difícil para todos o para la gran mayoría de personas, un año que ha cambiado la vida de mucha gente. Dentro de lo malo que ha sido, hasta hace un par de semanas, mi año iba normal. Lo más importante que tengo en la vida es mi mamá, a ella le debo todo lo que tengo y he logrado, y gracias a ella soy la persona que soy, ella es mi vida entera y mis ganas de salir adelante. Todo el año había estado bien de salud, sin ninguna complicación, pero hace un par de semanas tuvo vómitos y complicaciones en el estómago, y lo que era una simple infección, la acabó deshidratando al grado de bajar su presión al máximo y no tener fuerzas. Por qué llegamos a tanto? Porque a mi mamá no le gusta ir al doctor y literalmente la tuve que llevar cuando ya no tenía otra opción. En mi mente solo está el verla sin fuerzas a punto de desmayarse en mis brazos pensando lo peor, como pude corrí a urgencias y afortunadamente me ayudaron de inmediato a estabilizarla. Parecía que lo peor había pasado, pasaron 24 horas y seguía con la infección, pero ahora, los estudios arrojaban que el riñón estaba dañado, y si estaba dañado, había que dializarla, lo peor pasaba por mi cabeza, tenía que buscar otras opciones y llevarla a México con los mejores especialistas, había que esperar ya que me explicaban, como su riñón nunca había sufrido daños, podía volver a funcionar solo. 


Pasaban las horas, mi mamá seguía con su malestar, yo a lado de ella, sin dormir ni comer nada, sin ganas de nada, con lo único en mente de que se recuperará y pudiéramos salir cuanto antes del hospital. 72 horas después le hicieron un nuevo estudio, un estudio tal vital que dependía todo, si nos íbamos a México o esperábamos. Gracias a Dios sus estudios salieron bien, hubo una mejoría del 100% en comparación a como llegamos, no había ningún daño en el riñón, fue un milagro de Dios, tenía tantas cosas en la cabeza, unas ganas de llorar y soltar todo, pero no podía para que mi mamá me viera fuerte. 


Las próximas horas y días, mi mamá fue recuperando la fuerza, en total pasamos 5 días en el hospital, y aunque ya pasó una semana de que salimos, aún está un poco débil, pero gracias  a Dios fuera de cualquier peligro o problema. Estoy tan agradecido con los doctores que la valoraron, las enfermeras, camilleros y ex compañeros de trabajo que estuvieron al pendiente y ayudando en todo lo que podían, a sus amigos que estuvieron pendiente, a mis tías que estuvieron a distancia y a todas las personas que rezaron para que ella mejorará y pudiera salir de esto. 


Fueron las peores horas de mi vida en 30 años, pero también fueron las mejores cuando todo pasó y quedó en un susto que gracias a Dios no pasó a mayores. 

Cuando la vida te sorprende con estos golpes y estas pruebas, valoras mucho más todo lo que tienes, y te das cuenta, que más allá de tener grandes lujos o cosas sin importancia, te das cuenta que mientras haya salud, todo lo demás viene por añadidura.